El sonido del silencio me dice,
que errores y aciertos conforman el pasado,
que solo el recuerdo de una sonrisa,
cambia la definición de error.
El sonido del silencio me duele,
me hicieron daño.. Pero también lo hice yo,
el silencio me dice que no busque culpables,
que hay hechos donde no solo impera la razón.
El sonido del silencio me explica,
que la soledad es una buena experiencia,
aunque el silencio también me aconseja,
que mire a mi alrededor.
El sonido del silencio me enseña,
que mi inquietud es el motor de mi alma,
que el sufrimiento es solo una excusa,
una llamada de atención.
El sonido del silencio me recuerda,
que he recorrido un duro pasado,
que siento un presente
y que al futuro no le falta valor.
El sonido del silencio me cuenta
que me educaron para ser fuerte,
que las condiciones las pone el destino,
pero que el coraje lo pongo yo.
El sonido del silencio me muestra,
que no hay que dar esperando recibir,
que la amistad no es un objetivo,
sino un camino a definir.
El sonido del silencio me reclama
que haga eco de mis sentimientos,
que puede que haya quién me escuche,
que me falta ponerle voz.
El sonido del silencio me grita
que le estoy escuchando,
que lo que escucho, lo escribo,
y que escribirlo es mi propia provocación.
Quiero escuchar el sonido del silencio,
no solo el sonido de la razón,
porque la razón solo es eso un pensamiento,
el silencio habla desde el corazón.